El sacerdote que entregó su amor y su saber
Cada vez es más frecuente escuchar la premisa de que nadie se quede atrás. En el siglo pasado, un sacerdote ya establecía las bases para desarrollar este modo de vida. “He aprendido que el problema de los demás es igual que el mío. Salir todos juntos de ello es la política que hay que seguir. Salir solo es avaricia”.
Hace unos años, cuando se cumplía el cincuenta aniversario de la muerte de Lorenzo Milani (1923-1967), y el papa Francisco visitaba su tumba en Barbania, en la Toscana, donde transcurrieron…
Este contenido es solo para suscriptores.
Si eres suscriptor de papel, contacta para tener acceso Solicitar acceso
Si aún no eres suscriptor Pulsa aquí para suscribirte.
Inicia sesión si ya tienes tu acceso.
Si eres suscriptor de papel, contacta para tener acceso Solicitar acceso
Si aún no eres suscriptor Pulsa aquí para suscribirte.
Inicia sesión si ya tienes tu acceso.
Los comentarios están cerrados, pero trackbacks Y pingbacks están abiertos.