Educación transformadora
La educación transformadora es un proceso socioeducativo que promueve una ciudadanía responsable y comprometida con la realidad para construir un mundo justo y respetuoso con la diversidad y el medioambiente.
Esta es una síntesis del modo como definen la educación transformadora la Red de Entidades para el Desarrollo Solidario (REDES), básicamente conformado por organizaciones de inspiración cristiana que trabajan el compromiso con la cooperación al desarrollo. Entre sus objetivos se proponen, en su perfil institucional aprobado en 2020: valorar la diversidad como fuente de enriquecimiento humano; el respeto de los derechos humanos individuales y sociales; la conciencia ambiental y el consumo responsable; la equidad de género; el diálogo como herramienta para la resolución pacífica de los conflictos; la participación democrática, la corresponsabilidad en la construcción de una sociedad equitativa y solidaria.
Unos meses antes, la Unesco planteó la cuestión de cómo participar en una educación transformadora. En su documento, reconoce que, “si bien existe una extensa bibliografía sobre educación cívica y ciudadana, hay menos claridad acerca del significado de una participación transformadora responsable de estudiantes en relación con la ciudadanía mundial y el desarrollo sostenible”. A pesar de las diferencias lógicas de la diversidad de contextos, se elaboró un documento que explora la participación de la educación transformadora. Basándose en la meta 4.7 del cuarto objetivo de desarrollo sostenible, la Unesco brinda este documento, disponible en la red, para promover la educación para la ciudadanía mundial y la educación para el desarrollo sostenible para facilitar que los estudiantes asuman roles activos, responsables y eficaces que les permitan hacer frente a los desafíos locales y globales. Este documento se basa en una reunión de expertos organizada por la Unesco y el Centro Ban Ki-moon en febrero de 2019 en Seúl. En la reunión, participaron expertos de políticas gubernamentales, educadores, jóvenes activistas y empresarios sociales.
Transformación y ERE
En cuanto a lo que se entiende por transformación, se explica que es un cambio en dos niveles: primero, en el estudiante, en relación con el proceso que emprende y, en segundo lugar, en su participación en las instituciones y normas establecidas, que puede producir más o menos cambios dependiendo de su naturaleza, sus objetivos y su sostenibilidad. La participación puede ser colectiva o quedarse en el nivel individual, ambas formas son válidas para emprender procesos de empoderamiento y transformación. Además de los cambios en lo personal, esta participación supone la existencia de una sociedad civil dinámica en la que los ciudadanos pueden trabajar en redes sin ánimo de lucro e informales sobre cuestiones de interés público. Los compromisos están orientados por la búsqueda de la justicia social, considerando los derechos humanos, el bienestar y la equidad, tratando de influir en las instituciones para que promuevan estos objetivos. Finalmente, se subraya como característica de esta participación que sea liberadora, alcanzando el cuestionamiento de maneras establecidas que pueden verse transformadas por nuevas formas de convivencia. La guía concluye con sugerencias prácticas acerca de cómo promover una participación transformadora mediante la educación.
Pues bien, esta educación transformadora, con sus valores de promoción humana, dignidad y derechos fundamentales de todos, la empatía y la inclusión, el cuidado de uno mismo, de los otros y de la naturaleza, y la construcción de la casa común, están visiblemente presentes en el currículo de Religión Católica de la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Educación (LOMLOE), tanto en sus competencias específicas como en sus saberes básicos. Será suficiente leer su tercera competencia para percibir cómo, desde la visión cristiana de la vida, se contribuye a esta educación transformadora que se plantea. La sola lectura de los títulos de los tres bloques de saberes básicos para todas las etapas también revela este compromiso de la ERE con la ciudadanía mundial y el desarrollo sostenible.